Historia mágicas/Harry Houdini

Ehrich Weiss nació el 24 de marzo de 1874 en Hungría. Su nombre artístico, Harry Houdini, lo tomó del mago francés Jean Eugène Robert-Houdin. Inició su carrera en el año 1882 como trapecista. Más adelante se haría famoso por sus espectáculos de magia, con una asombrosa habilidad para liberarse de esposas, baúles con candados y cadenas de cualquier tipo. Aunque comenzó su carrera como mago haciendo juegos de cartas y otros efectos, pronto comenzó a considerar practicar el escapismo.
Uno de los escapes clásicos que se asocian con Houdini es "La Metamorfosis”, que tanto en su época como en el futuro inspiraría múltiples variantes. El ilusionista era atado e introducido dentro de un saco, a su vez dentro de un baúl, todo ello era atado y sujetado con candados. Entonces una ayudante subía encima del baúl, levantaba una cortina y 3, 2, 1…;al instante siguiente la cortina bajaba mostrando a un Houdini liberado en el lugar que ocupaba la ayudante. Entonces se abría el baúl y se desataban todas las cuerdas del saco para mostrar a la asistente dentro de la caja. Este número sigue siendo espectacular hoy en día cuando se ejecuta con presteza y habilidad. Se cree que Houdini ejecutó este número más de diez mil veces en toda su carrera.
Para promocionarse, Houdini solía presentarse en una ciudad ante el jefe de la policía local, o en la prisión, junto a un grupo de periodistas. Luego el mago era encerrado, atado, o encadenado. Cuando conseguía liberarse, su hazaña obtenía una gran promoción en la prensa. En cierto modo fue un precursor de la autopromoción: aumentaba y mejoraba la imagen y percepción de sus hazañas tanto antes como después de haberlas realizado, alcanzando cotas cada vez más altas.
Houdini;pronto comenzó a inventar nuevos retos como parte de su espectáculo en teatros, en su afán por conseguir lo imposible y causar más sensación. Uno de ellos fue el Bidón de Leche. Consistía en un angosto bidón relleno de agua en el que era sumergido completamente y del que escapaba tras unas cortinas, fuera de la vista del público. Se dice que pedía a la gente contener la respiración tanto como él mientras intentaba escapar (algo que nadie conseguía) a la par que un gran reloj mostraba el paso de los minutos. La realidad era que solía escapar al poco de entrar; a veces se sentaba durante un rato a leer el periódico mientras la orquesta tocaba música para imprimirle mayor emoción al número. Entonces levantaban la cortina y aparecía Houdini, culminando el número.
Tanto para este como para otros números Houdini hizo algo que es común en muchos escapistas y especialistas en retos y proezas físicas: entrenar hasta el límite. En sus biografías se cuenta que cada día se sumergía en una bañera de agua llena de bloques de hielo. Con la práctica llegó a ser capaz de permanecer hasta tres minutos sin respirar. Eso le permitiría enfrentarse a muchos de los retos mejor preparado que cualquier persona e incluso que algunos atletas. En general no se considera que esas hazañas sean «trucos» como tales, sino simplemente el resultado de una fuerza física, habilidad y técnica en cierto modo «sobrehumanas».
Un día de octubre de 1926 unos estudiantes universitarios se dirigieron a Houdini mientras descansaba tras haber terminado uno de sus espectáculos. Uno de ellos le retó a recibir unos cuantos golpes en el abdomen, para comprobar si su resistencia física era tan legendaria como se decía. El mago aceptó sin miedo. Sin embargo, antes de que pudiera prepararse adecuadamente, recibió un primer fuerte puñetazo, al que siguieron varios más. Aunque aguantó el envite como un buen actor, había sufrido sin saberlo una rotura de apéndice que acabó derivando en una peritonitis. En los siguientes días intentó trabajar, pero estuvo aquejado de fiebre y grandes dolores. Unos días después le confesó a su hermano que estaba "cansado" y que su problema le iba "a vencer". Así, nueve días después fallecía. No se le practicó la autopsia, por lo que las verdaderas causas de su muerte siguen siendo un misterio.